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Regularmente el mejor momento para llevar a cabo una sesión fotográfica de maternidad es entre la semana 26 y 34 (entre el sexto y sétimo mes). Ya que en este momento la pancita tiene la forma ideal, además de que tú puedes cambiar de posición con mayor facilidad, por lo que tu sesión será más cómoda.

Muchas chicas quieren esperar a que su embarazo se note más, sin embargo en las fotos la pancita se ve más grande de lo que es. Es muy común que las futuras mamás digan: “¡que panzota!” cada que les muestro algunas fotos en la cámara. Otro aspecto a considerar es que en las últimas semanas comienzan a aparecer manchitas y la pancita cambia de forma, sin mencionar que ya es más difícil cambiar de posturas.

Las mejores fotografías de maternidad son a las que se les invierte; y no sólo dinero, sino tiempo y creatividad. Internet está lleno de ejemplos que pueden servir de inspiración para tus fotografías de embarazo. Puedes buscar términos como “fotos de maternidad“, “fotos de embarazo” “ fotografías de embarazo, inspiración” e incluso esos mismos términos en inglés. Páginas como Pinterest, Flikr y google imágenes, te pueden ser muy útiles.

Cuando veas ejemplos fíjate qué accesorios son necesarios; telas, juguetes, flores, etc. Elige las que mejor vayan con tu personalidad y estilo. No a todos nos van las mismas poses, pero ello no impide que podamos conseguir imágenes bonitas. Cuando tengas una selección de fotos que te gusten, se las puedes mostrar a tu fotógrafo con anticipación para qué él tenga una idea del estilo que buscas y juntos puedan organizar su sesión.

Recuerdo mis clases de carpintería en la escuela secundaria, cuando el maestro decía: “entre menos clavos y resanador tenga un mueble, es mejor”. En la fotografía sería: “entre menos retoque y edición, lleve una foto, es mejor”. Con esto me refiero a que debes cuidar los detalles que estén en tus manos, tales como llevar ropa planchada, rasurar la pancita, estar al pendiente de tu maquillaje y peinado, entre otros.

En mi propia experiencia cuando estoy retocando una foto y ya he dedicado demasiado tiempo a algún detalle en particular, como ropa muy arrugada, o cabello despeinado, puedo prestar menos atención a otros detalles de la foto. El tiempo dedicado a retocar cada foto es limitado. Entre mejor salgan las imágenes desde la cámara, el fotógrafo podrá enfocarse en aplicar sus conocimientos de retoque en los aspectos que resalten la belleza de la fotografía.

Si ya buscaste ejemplos o tienes alguna idea en mente debes prestar atención a la ropa que llevarás a tu sesión. Hay algunos estudios que cuentan con vestuario, sin embargo, siempre es mejor que tu tengas tus opciones y la ropa que te puedan prestar que sea un complemento. Reduce los imprevistos.

En una sesión regular se realizan de 2 a 5 cambios de ropa, eso tienes que platicarlo previamente con tu fotógrafo. Si vas en pareja o en familia combina los colores y sobre todo los estilos. Pasa con cierta regularidad que la futura mamá lleve varios cambios de ropa, entre ellos un vestido largo muy formal y el esposo sólo una camiseta estampada y un pantalón deslavado, eso sería difícil de integrar en una foto. Como ya mencioné antes cuida que la ropa esté planchada y lo más pulcra posible.

Tal vez este debería ser el primer punto, ya que en última instancia de él depende que tus fotografías de maternidad sean un bello recuerdo de esta etapa. Es tema de un futuro artículo aquello que debes esperar de un fotógrafo profesional, sin embargo lo más importante es que su trabajo previo sea lo que estás buscando para ti.

Te recomiendo que busques en tu ciudad a un fotógrafo con experiencia en la fotografía de maternidad ya que él entenderá la dinámica y ritmo que estas sesiones tienen en particular. Es importante que sea un fotógrafo profesional bien establecido, pues así podrás tener mayor seguridad de que vas a recibir las fotos que estás buscando en tiempo y forma.